Cuando me toca estar sentada en los
salones de baile me encanta
mirar, admirar, deleitarme los ojos y el alma con los bailadores, y con una
pronunciada sonrisa me digo:
“Voy a escribir historias de baile y algún día voy a retratar a los bailadores”.
Aunque estoy segura que nada de eso podrá describir la sensación de alegría,
diversión, erotismo, magia, brillo, luz, amor, sensualidad, risas, gestos,
miradas, contacto, ritmos y hasta arrítmicos que andan por ahí en la pista.
En fin… que de esas historias
he pensando muchas cosas...
- “Qué
bueno que existe la salsa en línea porque como les ayuda a los arrítmicos!!!” y no digo que todos, pero
muchos bailadores de salsa en línea son arrítmicos, nomás es cuestión de
mirarles un ratito para observar que bailan sin ton ni son, y les ayuda que cuiden la
cuadratura de sus pasos y la caída en línea, así por lo menos se ve una forma (coreografía).
Y no es mi incapacidad para bailar en línea lo que me hace hablar –confieso que no sé bailar salsa en línea (sé lo básico), y no bailo porque no me gusta y porque yo digo que orgánicamente (físicamente) ese baile no es para mí, no por mi estructura física, no por mi equilibrio, no por mi ritmo, bueno esa ya fue una larga explicación que a nadie le importa… jajajajaja–. Decía, no es mi incapacidad para bailar salsa en línea lo que me hace hablar mal de ella, porque es verdad que hay profesionales de salsa en línea que bailar como dioses, claro que los he visto en exhibiciones y conciertos.
- “Qué
bonitos se ven los bailadores enamorados”.
De verdad, no hay acto más hermoso, erótico, amoroso, gozoso y divertido que bailar con el ser amado, eh!!! Sí lo sabré yo, bueno lo sabía, bueno lo sé, en fin que eso no importa y eso no les quería decir. En fin que los bailadores enamorados o los enamorados que bailan se cuecen a parte, porque no importa el ritmo y ni el nivel de baile, la cadencia generada entre esos dos es mágica, es verlos bailar entre las nueves, así… así… así es como flotan y no importa que no tengan los grandes pasos ni las increíbles vueltas, pero sacan polvo del amor a la pista y a ellos les brillan los ojos, el cabello y la piel. En serio, es la magia que dibuja una gran sonrisa nomás de verlos.
- Otra cosa que siempre pienso: el baile, al igual que la muerte, es otro de los actos más democráticos que conozco. No importa la edad, género, condición, profesión, capacidad física y sicológica… TODOS los que quieren bailar, bailan. Y pues nada, eso no lo deduzco sólo cuando miro, sino cuando bailo, al tocar la textura de las manos de mis compañeros de baile y así vez en cuando puedo preguntarme: taxista? repartidor de agua? mesero? carpintero? oficinista? chofer? maestro? herrero? vendedor de seguros? taquero? jajajaja… Y no crean que me la paso analizando a mis compañeros de baile, noooooooo yo cuando bailo, bailo. Lo que me ha ocurrido es que me encuentro a esos bailadores por la ciudad y ahora sé que: unos son choferes, otro mesero, otro repartidor de agua, otro vendedor ambulante… y así, así, así…
En general, y ya después de
algunos años de andar por el mundo del baile, algunos bailadores ya saben que sé
bailar, pero en particular tengo la percepción –y es eso, percepción– de que
cuando me sacan a bailar, "suponen" que bailo lo básico y se sorprenden, y hasta diría que se llevan un chasco, cuando descubren que sé más de
lo que "aparento" y eso lo hacen cuando al intentar hacer gala de sus mejores vueltas y pasos se dan cuenta que los sigo, los sigo, sigo el paso, sigo el baile, sigo el nivel… jajajajajaja!!! Sí, sí, sí… aunque usted no lo crea, bailo y
bailo bien, no es pretención, es sólo que acepto mi habilidad para bailar son, salsa, guaguanco, cumbia, guaracha, en fin que me gusta la rumba, la bailada, sacarle brillo al piso, sacar ese polvo mágico a la pista... jajajaja!! Me gusta y disfruto bailar, ya saben, ya saben, ya saben lo mío... lo mío... es el baile, buenoooo también el yoga, bueno tambien mi trabajo, bueno también hornear, bueno también escribir, bueno sacar fotos, buenooooo también viajar... bueno... bueno... bueno que todo eso me gusta hacer en mi vida.
En fin que ahí les dejo algo para que se inspiren y bailen... bailen... bailen
