Cosas que todas y todos debemos saber sobre los más altos compromisos y obligación de los Estados Nación para garantizar igualdad, desarrollo y paz para las mujeres en el mundo y que es de interés de toda la humanidad. Es decir, la agenda de género, de mujeres, de igualdad, de equidad, de oportunidades, de seguridad, justicia y paz para niñas y mujeres es mundial. Muchos países han avanzado en la creación de capacidades integrales para garantizar la vida y el desarrollo pleno de cualquier mujer, otros, como el caso de México, sus pasos han sido tímidos, titubeantes, ligeros, lentos, algunas veces se han paralizado y, peor aún, van hacia atrás.
Lo que hoy lo que quiero compartir es un poco de información sobre los compromisos y obligación de los Estados Nacional en el mundo para avanzar hacia ese horizonte de desarrollo pleno, feliz y en paz para las mujeres.
La Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer se llevó a cabo en 1995 y participaron 189 países que comprometieron a trabajar y avanzar en la Plataforma de Acción, y parte de dos supuestos básicos:
1º Se reconoce las profundas y brutales desigualdades para el desarrollo entre hombres y mujeres; y
2º La existencia de un Estado Garante para crear capacidades y condiciones para que las niñas y mujeres tengan una vida plena, segura y en paz, “los gobiernos demuestren un inequívoco liderazgo y un sólido compromiso para promover los derechos de las mujeres”.
La Plataforma de Acción Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer dispone una serie de compromisos (líneas de acción) que debían traducirse en leyes, instituciones, políticas públicas, programas, presupuestos, procesos y lo más importante: un cambio de paradigma para que las y los gobernantes asumieran sin titubeos la perspectiva de género como parte inherente de su quehacer gubernamental. No como algo extra ordinaro o especial, sino como parte de su razón de ser.
Cosas que todas y todos debemos saber sobre los más altos compromisos y obligación de los Estados Nación para garantizar igualdad, desarrollo y paz para las mujeres en el mundo y que es de interés de toda la humanidad. Es decir, la agenda de género, de mujeres, de igualdad, de equidad, de oportunidades, de seguridad, justicia y paz para niñas y mujeres es mundial. Muchos países han avanzado en la creación de capacidades integrales para garantizar la vida y el desarrollo pleno de cualquier mujer, otros, como el caso de México, sus pasos han sido tímidos, titubeantes, ligeros, lentos, algunas veces se han paralizado y, peor aún, van hacia atrás.
Lo que hoy lo que quiero compartir es un poco de información sobre los compromisos y obligación de los Estados Nacional en el mundo para avanzar hacia ese horizonte de desarrollo pleno, feliz y en paz para las mujeres.
La Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer se llevó a cabo en 1995 y participaron 189 países que comprometieron a trabajar y avanzar en la Plataforma de Acción, y parte de dos supuestos básicos:
1º Se reconoce las profundas y brutales desigualdades para el desarrollo entre hombres y mujeres; y
2º La existencia de un Estado Garante para crear capacidades y condiciones para que las niñas y mujeres tengan una vida plena, segura y en paz, “los gobiernos demuestren un inequívoco liderazgo y un sólido compromiso para promover los derechos de las mujeres”.
La Plataforma de Acción Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer dispone una serie de compromisos (líneas de acción) que debían traducirse en leyes, instituciones, políticas públicas, programas, presupuestos, procesos y lo más importante: un cambio de paradigma para que las y los gobernantes asumieran sin titubeos la perspectiva de género como parte inherente de su quehacer gubernamental. No como algo extra ordinaro o especial, sino como parte de su razón de ser.
La Plataforma de Acción:
1.- Proyectó un mundo en el que todas las niñas y mujeres podamos ejercer libertades y opciones, y hacer realidad todos nuestros derechos, como el de vivir sin violencia, asistir a la escuela, participar en las decisiones y tener igual remuneración por igual trabajo.
2.- Imaginó la igualdad de género en todas las dimensiones de la vida, y ojo, porque no sólo hablamos de las violencias, cuya expresión más brutal es el feminicidio. No, hablamos de las violencias ejercidas y vividas en todos los ámbitos del desarrollo de una mujer desde que nace hasta que muere. Estas dimensiones son:
Cuando se leen esas visiones y líneas de trabajo, no debería haber duda de nuestro quehacer en todos los ámbitos de la vida de una mujer: hogar, escuela, trabajo, sociedad, legislación, gobierno, espacios públicos.
No se hace un "favor" al levantarnos una denuncia o hacen algo "extraordinario" para investigar un feminicidio, no debería serlo, o que se busque trato igualitario en empleos, concursos de oposición, cargos de elección, altas direcciones. Nada de eso debería ser extraordinario: se debe hacer. Es lo mínimo que se espera de un Estado como Garante de estos derechos: un Estado Nación.
Y sólo me quedo con pensamiento, que ahora les comparto, para quienes siempre quieren en contra "un" "culpable" ante todo los fenómenos sociales, culturales, económicos, ideológicos, religiosos, humanos...
Para avanzar en el desarrollo pleno de las mujeres “toda la humanidad tiene la responsabilidad de actuar, y en especial los gobiernos como principales garantes de derechos.”
Dra. Phumzile Mlambo-Ngcuka Secretaria General Adjunta Directora Ejecutiva ONU Mujeres
En resumen:
Todas y todos (personas e instituciones) tenemos algo que hacer para crear ecosistemas que protejan la vida de las niñas y mujeres, y que garanticen su desarrollo integral y pleno.
Otra reflexión, una que siempre traigo cuando escucho sobre la muerte de otra niña, otra mujer, y eso es terrible, el hecho es terrible, y pienso: no hicimos nada, no estamos haciendo suficiente, no lo estamos haciendo rápido, esto o aquello urge, ¡chinga, porqué no nos apuramos! Todas y todos necesitamos estar 10 pasos adelante de las capacidades integrales para el desarrollo de las niñas y mujeres.
Yo tengo mi agenda personal en eso, desde hace muchos años, y es tener redes de mujeres con las que avanzamos, nos impulsamos, nos abrazamos, nos levantamos, nos apoyamos, porque ya sabemos que solas no podemos, que tenemos que estar en bloque para protegernos y cuidarnos: #sororidad, le dice, pero siempre pienso en el sentido más básico y fundamental de la comunidad, de una familia, de un grupo que se tienen en todas las sociedades y a los que hay que apelar.
Referencias y lecturas obligadas
