De nuevo por el buen camino... no sé el de otros, pero el mío sí

Cascada "La Gloria", Apulco, Puebla

Llevo días, semanas, meses, ya casi un año que nomás no encuentro la manera de recuperar mi práctica de yoga y no lo duden tuve muchas justificaciones: que sí mala salud, que sí mucho trabajo, que sí muchos problemas, que sin dinero… bla-bla-bla. Lamentablemente debo aceptar que mi nivel de energía anda bajo-bajo-bajo, así que hoy me obligué a salir de esta casa-oficina para ir a clase…

• Y que bendición vencerse a uno mismo;
• Y qué bendición encontrarte con la buena voz y mejor guía de tus maestros, agggg!! Gracias a mi maestra Adriana... Adri... Adri: gracias!!!
• Y qué bendición que tu cuerpo tenga esa excelente memoria, porque entonces sin mediar “proceso de pensamiento” me llegó el alargamiento, la extensión, la fuerza, la energía, la vitalidad, el dinamismo y el temple que te da el yoga.

Y no obstante que sudé tremendamente, el cuerpo, con su memoria, revivió con su primera clase.

Y entonces les digo que le sacaré horas a mi sueño para seguir estudiando música y para regresar a mi práctica de yoga, porque además pensé “no inventes, antes venías de Tlalnepantla, te levantabas a las 5 a.m. y tenías un trabajo de oficia de 12 horas”. 

Así que, hoy, quité de mi cabezota todas esas limitantes que "tenía" para retomar el camino de la energía, la concentración, la salud y la alegría que me da el yoga.

Andën… andën que cada uno puede sacar tiempo y ganas para hacer lo que sea para estar bien.

Namaste.

(Y gracias al Sr. Garnica por alentar estos proceso de BIEN-estar... salud... gracias... gracias... gracias)