Efectivamente, efectivamente, lo peor de hacer una pregunta estúpida, en mi caso, no es que la formulé, es que alguien me la contesto. Les cuento.
[[Contexto Metro Pino Suárez en la línea Rosa a las 7.30 de la noche, es decir hasta el gorro]]
Le pregunto al erguido y bien informado poli del metro [[por supuesto con su atento saludo de buenas noches y todo lo demás]]:
— Oiga ¿la salida para Izazaga?
— Es ésta. Me alarga la mano en dirección a los torniquetes que estaban frente a nosotros.
— ¿Pero esa salida me saca de este o del otro lado de Izazaga?
— De éste… ¡caray cómo les explico :| :|
Chale!!
Cuando me da la respuesta, reparo en lo pendeja que fue mi pregunta,
eso de este lado no me resuelve nada: no sé cuál es este lado y menos el
lado que tenía en la cabeza el poli. Y voy de nuevo:
— ¿Esta salida me saca al sur o norte de Izazaga?
— No sabría decirle.
mmm!! Y voy de nuevo.
—¿Esta salida me saca a 20 de Noviembre o Tlalpan?
— La saca de este lado…
En
ese momento, ya tenía ahorcada la carcajada por mi estúpida pregunta y
por la contundente respuesta del poli: porque efectivamente esa salida
me sacaba de este lado, pero cuál era ese lado, no lo sé, no lo supe y
no lo quise investigar, y opte por caminar hacia la línea azul de metro.
Moraleja: sí no sabes dónde queda éste lado: mejor ni preguntes!!